La segunda edición del festival ParaĆso reunió en cuatro escenarios una gran selección de artistas de todo el mundo y aƱadió una tarima exclusiva para la escena emergente de Madrid. La cita se volvió a dar en un espacio muy especial, el campus de la Universidad de Madrid, una de las mĆ”s grandes de la capital. El lugar escogido logró dar al evento un toque natural y fresco, gracias a la cuidada escenografĆa y a la diversidad de instalaciones.Ā
El viernes, Kampire dio el gatillazo de salida al festival desde el escenario Manifiesto By Absolut. Con un set cargado de fuerza donde reinaron los ritmos tropicales,Ā el afrobeat yĀ el booty, anunció al pĆŗblico lo queĀ le iba a deparar el fin de semana. ParaĆso fue una de las primeras paradas de esta DJ proveniente de Uganda quien vive en EspaƱa, y se le espera en muchas otras pistas de baile este verano. No la pierdas de vista a ella ni al colectivo al que pertenece, Kampire, Nyege Nyege Tapes.
La elección para continuar bailando se presentaba difĆcil. En el escenario principal, Maribou State, brillaba con susĀ canciones elegantes, bailables y coloristas. Ā Al mismo tiempo, en el escenario club, Jacques Greene conquistó al pĆŗblicoĀ con su electrónica melódica y vibrante.
Si nos habĆamos quedado con ganas de mĆ”s despuĆ©s de la actuación de Maribou State, Bob Moses siguió la misma onda. El dĆŗo americano presento con gran aclamación su Ćŗltimo trabajo āBattle Linesā (Domino Records, 2018). DespuĆ©s de un rato elegimos ir al escenario Manifiesto, donde al mismo tiempo, los ritmos andinos y electrónicos mĆ”s profundos conquistaban a los asistentes. Nicola Cruz deleitó con uno de los mejores live del festival. Los visuales tambiĆ©n fueron parte del hechizo, con los que logró que la multitud se perdiera en los ritmos folklóricos mientras el sol caĆa.
La noche comenzó en el escenario principal con un gran show, el live set de Cerrone. Su french touch y sus mĆticos temas como āSupernaturalā y āLove in C minorā, Ā junto con unos vistosos visuales, provocaron el descontrol en la pista de baile. A continuación, los tambiĆ©n franceses Polo & Pan lo dieron todo; bailaron, interactuaron cĆ”lidamente con el pĆŗblico y nos guiaron en un intenso viaje cósmico al tocar diferentes gĆ©neros, desde Ā bossa nova hasta cumbia.
Mientras, en el escenario Club se daba otro tipo de viaje, John Talabot y KiNK dieron actuaciones admirables. Para cerrar la noche, Young Marco nos regaló los últimos bailes en el escenario Manifiesto con el eclecticismo musical al que nos tiene acostumbrados.
El sĆ”bado el sol seguĆa brillando y animĆ”ndonos a seguir con la buena mĆŗsica. El escenario principal acogĆa a Channel Tres, quien presentó su primer EP y ofreció un gran show lleno de ritmos hip-hop, house y coreografĆas contagiosas para cerrar con su hit āControllerā. Sin embargo, esta no fue su Ćŗltima aparición en el festival.
Nos trasladamos al escenario Club para ver a Carista. Esta DJ holandesa de descendencia surinamesa desató al público con su cuidada selección funky y los ritmos mÔs groovies. Le siguió Peggy Gou, quien demostró por qué ocupa los rankings de artistas y tracks del año. Su selección musical incluyó desde house y acid hasta sonidos mÔs rompedores como el juke. Aquà Channel Tres se marcó unos pasos rÔpidos en el escenario.
Laurent Garnier cerró Paraiso desde el escenario principal. Empezó bien, y desencadenó la locura con āCrispy Baconā y su tĆ©cnica curtida. Al rato elegimos seguir con Mano le Tough, ya que lamentablemente el sonido presento problemas dejando al pĆŗblico con ganas de mĆ”s, incluido al propio Laurent.
A pesar de la cuestión sonora del Ćŗltimo dĆa que afectó a algunas actuaciones, es innegable que el festival ha demostrado tener un gusto musical Ćŗnico hacia el eclecticismo y la vanguardia. Su voluntad de ofrecer una mirada global de la escena contemporĆ”nea electrónica es el sello distintivo de ParaĆso que ya se ha convertido en referente en Madrid.















